Eternally twenty-one...
Si bien no es la frase original (Mariah Carey siempre dice que su edad es "eternally twelve", pero no me quiero quedar estancado ni regresar a los doce), tiene un cierto appeal: dejar de contar desde los 21, porque 21 es un número sexy, estás en la mera edad de la belleza y la diversión, eres adulto pero no tanto como para tener un exceso de responsabilidades, o al menos así lo veo yo.
En exactamente un mes cumpliré 21 años. Es un concepto aterrador, pues eso significa que estoy cada vez más cerca de mi muerte, y también me aterra porque el último año de mi vida viví encerrado en mi casa por culpa de una estúpidA virusA (frase cortesía de mi amiga Jayani), o sea, desperdicié mis 20 encerrado en la casa. Wow.
Estoy dispuesto a recuperar el tiempo perdido, he decidido que en cuanto sea posible, saldré más con mis amigos, haré el esfuerzo por cultivar las amistades que he dejado por ahí porque la contaduría me consume, le meteré todas las ganas del mundo al último año de universidad, pero también me haré el tiempo para divertirme y relajarme, no todo en la vida es estudiar.
Para mis 21 decreto el amor. Siempre lo hago, pero al parecer I'm not doing it right. Decreto el amor, el amor de juventud, ese amor tan bonito que se ve en las películas, pero in real life, sentir todo eso que sienten los protagonistas de To All The Boys I've Loved Before, The Kissing Booth y todas las rom-coms de Julia Roberts, pero también quiero la parte del amor donde creces junto con tu pareja, evolucionan juntos, se convierten en mejores personas el uno por el otro, enfrentan sus problemas juntos: nosotros contra el mundo. Quiero eso, quiero todo lo bonito y lo no tan bonito que implica el amor.
También decreto viajes. Quiero viajar. Siempre me han gustado las grandes urbes cosmopolitas, going to New York on a whim like in the movies, going to LONDON: a dream. Quiero viajar acompañado, de mis amigos o de la persona con la que decida compartir mi juventud. Quiero viajar, tomarme fotos, crear recuerdos, vivir experiencias... QUIERO COMERME EL MUNDO A MORDIDAS. The world is my oyster.
Decreto todo lo bello que me merezco, decreto todo lo bueno que me merezco, decreto mucho éxito y abundancia para mis 21. Decreto plenitud. Suena muy utópico todo y, posiblemente no se cumpla todo, pero tengo esperanzas de que las cosas que he proyectado y decretado en este artículo, en la medida de lo posible (recordemos que la virusA sigue presente y maybe no se va pronto) se cumpla.
No todo es decretar y esperar a que todo se cumpla. También quiero hacer cosas de provecho con mi tiempo para mis 21. Espero seguir escribiendo para ustedes y espero que me sigan leyendo. Quiero empezar dar consultoría contable en la medida de lo posible, más allá de que mis amigos nomás me hablen para preguntarme cómo descargar su cédula del RFC, quiero hacer labor altruísta. Quiero hacer muchas cosas, porque como dije, the world is my oyster.
Muchas personas me habrán dicho a lo largo de mi vida que deje de soñar tantas cosas y abra los ojos a mi realidad. Creo que he pasado mucho tiempo viendo mi realidad y me han pasado tantas cosas en mi vida como para seguir viendo esta cruda realidad, quiero soñar, traer mis sueños a la realidad, I wanna live on my own terms! Quiero vivir haciendo lo que yo quiero hacer, no lo que todos esperan que haga, gran parte de mi vida hasta ahora ha consistido en hacer lo que se espera de mi.
Quiero romper el molde un poco, salir de mi esquema normal, hacer las cosas que yo quiera sin importar qué fregados opinan los demás, vivir mi vida de forma auténtica, siendo yo mismo y espero que todos ustedes me acompañen en esta travesía que estoy por emprender.
Gracias a todos los que me han acompañado hasta ahora en este espacio, les agradezco siempre el apoyo y el tiempo que invierten en leerme. Espero seguir mucho tiempo más compartiendo mis experiencias en este espacio, y espero que sigan apoyándome como hasta ahora lo han hecho. Love you guys so much!!
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